Juvénal Habyarimana fue presidente de Ruanda entre 1973 hasta que el avión en el que viajaba fue derribado por un misil en 1994. Su muerte desató tensiones étnicas en la región y marcó el comienzo del genocidio de Ruanda. La autoría del atentado no ha sido esclarecida.
El 5 de julio de 1973, ocupando el cargo de ministro de Defensa tomó el poder derrocando a su primo Grégoire Kayibanda y al gobernante partido Parmehutu. Habyarimana era el líder del Movimiento Republicano Nacional para la Democracia y el Desarrollo. Durante los 20 años en los que gobernó Ruanda, favoreció a los hutus, el grupo étnico mayoritario al que él mismo pertenecía y que había estado en el poder desde 1959.
A principios de los años noventa, el Frente Patriótico Ruandés inició una rebelión contra Habyarimana y el gobierno de Ruanda. El FPR era una fuerza compuesta sobre todo por expatriados tutsis que habían desertado en masa del ejército de Uganda y cruzado la frontera.
El 6 de abril de 1994, el avión privado de Habyarimana, un Falcon 50 jet (regalo del primer ministro francés Jacques Chirac) se estrelló cerca del aeropuerto de Kigali. En la colisión murieron tanto Habyarimana como Cyprien Ntaryamira, un hutu presidente de Burundi.